El escudo de armas de la familia Frau está dividido en tres áreas, según la tradición oxiteca vigente en Baviera en el siglo XII, y que viajara con los inmigrantes germanos a las islas Baleares en dos oleadas migratorias sucesivas en los siglos XIII y XIV, la última coincidiendo con la sequía que asolara esa región de lo que hoy es Alemania y obligara a emigrar a sus habitantes
En la zona inferior o central, se observa un León de Glifantes, también llamado "glifo". Este animal mitológico, presente en bestiarios medievales desde siempre (véase fundamentalmente el de Jean de Montev ' Ideo, editado en Venecia en 1230), estuvo emparentado a los Frau pues se lo asociaba al valor, el coraje, la caballerosidad y sed de gloria que siempre caracterizó a los hijos de esta estirpe. En la lámina, el glifo apoya sus extremidades delanteras sobre una torre, que representa la toma del Castillo de Luterón, por parte de Bernardo Frau de Artes y Glorius, conde de Formentera e islotes aledaños, que peleando para el rey Ginastasio II venciera a los nortimanos en la batalla de Malmepesa, el 14 de febrero de 1558. Inmediatamente tomó posesión para su rey del mencionado castillo, que era la base hasta ese entonces jamás vencida de los nortimanos.
La estrella de cinco puntas refiere a la inclinación por la justicia y la defensa de los desposeídos, que los Frau siempre han llevado adelante en varios continentes y en todos los siglos.
La mano que ofrece un ramo de fresas, fruto por demás representativo de paz, fertilidad de la tierra y opulencia, representa la paz ofrecida por el referido conde a sus derrotados en la guerra mencionada. Las fresas son cuatro, una por cada una de las hijas del rey nortimano y a las que se dice, el conde habría seducido.
Contornan el escudo central, ramas de cipreses aragoneses y casquete de armadura de estilo francés con visera en oro macizo, tal como la usaron los Frau desde siempre para mostrar su francofilia y por lo que se los distinguía en los duelos medievales, de los que no recuerda la historia que perdieran uno solo.
